El drenaje linfático manual es una técnica terapéutica que se enfoca en el sistema linfático, un componente esencial del cuerpo humano. Antes de profundizar en esta técnica, es importante entender qué es el sistema linfático y su papel en nuestra salud.
¿Que es el sistema linfático?
El sistema linfático comprende una red de órganos, vasos y tejidos cuya función principal es mantener el equilibrio de líquidos en el cuerpo y contribuir significativamente a la respuesta inmunológica. Está compuesto por:
- Vasos linfáticos: son unos tubos delgados similares a las venas que transportan la linfa, un líquido que contiene proteínas, células blancas de la sangre y otros desechos corporales, desde los tejidos y órganos del cuerpo de regreso al torrente sanguíneo.
- Ganglios linfáticos: son pequeños órganos que se encuentran a lo largo de los vasos linfáticos y que contienen células inmunitarias que ayudan a combatir infecciones y enfermedades.
- Bazo: es un órgano que se encuentra en el abdomen y que tiene como función principal filtrar la sangre y eliminar las células dañadas o viejas.
- Médula ósea: es el lugar donde se producen las células sanguíneas, incluyendo las células blancas de la sangre que son importantes para el sistema inmunológico.
Los desechos que son eliminados por el sistema linfático son transportados por los vasos linfáticos y son filtrados en los ganglios linfáticos y en el bazo, donde las células inmunitarias presentes en ellos eliminan los desechos y cualquier sustancia extraña o potencialmente dañina que pueda estar presente en la linfa.
La linfa que queda es devuelta al torrente sanguíneo, donde se mezcla con la sangre y es transportada a través del cuerpo hasta llegar a los riñones, se filtra la sangre y eliminan los desechos y líquidos sobrantes del cuerpo en forma de orina.
¿Que es el drenaje linfático manual?
El drenaje linfático manual es una técnica terapéutica que se utiliza para estimular el sistema linfático y mejorar el flujo de la linfa en el cuerpo, que es un líquido transparente que circula por el sistema linfático y es vital para el funcionamiento del sistema inmunológico.
El drenaje linfático manual puede ayudar a reducir la retención de líquidos, mejorar la circulación sanguínea, disminuir la inflamación y mejorar la función del sistema inmunológico.
El terapeuta utiliza sus manos para aplicar movimientos lentos, repetitivos y una presión muy ligera sobre la piel y los tejidos subcutáneos que se dirigen en la dirección del flujo linfático. No deben causar dolor o molestias.
El drenaje linfático manual puede realizarse en diferentes partes del cuerpo, incluyendo las piernas, los brazos, el abdomen, la espalda, el tórax, el pecho y el cuello. El número de sesiones necesarias dependerá de la condición específica del paciente y de los objetivos terapéuticos y por lo general, se recomienda un mínimo de 6 a 8 sesiones para obtener los mejores resultados.
Beneficios que nos aporta
- Reducción de la retención de líquidos: Puede ayudar a reducir la acumulación de líquido en el cuerpo, especialmente en las extremidades inferiores. Esto puede ayudar a mejorar la apariencia de la piel, reducir la hinchazón y aliviar la sensación de pesadez.
- Mejora de la circulación sanguínea: Puede ayudar a mejorar la circulación sanguínea al reducir la presión en los vasos linfáticos y estimular el flujo sanguíneo. Esto puede ayudar a mejorar la oxigenación de los tejidos y reducir la inflamación.
- Estimulación del sistema inmunológico: Puede ayudar a estimular el sistema inmunológico al aumentar la circulación de la linfa y mejorar la eliminación de sustancias de desecho y toxinas del cuerpo.
- Reducción del estrés: Puede tener un efecto relajante y calmante en el cuerpo, lo que puede ayudar a reducir el estrés y mejorar el estado de ánimo.
Es importante destacar que el drenaje linfático manual no es adecuado para todas las personas y puede estar contraindicado en algunos casos. Por ejemplo, no se recomienda para personas con insuficiencia cardíaca, enfermedades infecciosas agudas, trombosis venosa profunda, linfoma, entre otras afecciones. Por lo tanto, siempre es recomendable consultar con un profesional antes de comenzar cualquier tratamiento.