Drenaje linfático manual

El drenaje linfático manual es una terapia que actúa sobre los vasos linfáticos con el fin de eliminar el líquido intersticial y linfático. Consiste en masajes muy agradables y suaves.

No obstante debemos diferenciar entre un sistema vascular linfático superficial y un sistema profundo. El sistema superficial drena el líquido intersticial de la piel y el sistema profundo drena el líquido intersticial de los músculos, las articulaciones, los órganos y los vasos y ambos sistemas se comunican con los vasos linfáticos perforantes.

El sistema vascular profundo desemboca en los grandes troncos linfáticos. Desde un punto de vista linfático, la piel está dividida en diferentes áreas. Los vasos linfáticos iniciales absorben la carga linfática de un área de piel determinada que son pequeñas, se superponen y son regiones cutáneas circulares que cubren la totalidad de la superficie corporal.

La linfa fluye de los vasos linfáticos iniciales hacia los precolectores. Varias áreas cutáneas vecinas constituyen una zona cutánea cuyos precolectores se comunican entre sí y desembocan en un colector linfático común. Los colectores drenan la linfa de las zonas cutáneas lineales.

El conjunto de varias zonas cutáneas forma un plexo vascular linfático, también denominado territorio. Entre los plexos linfáticos no existe comunicación vascular. Las comunicaciones entre colectores solamente existen dentro de un mismo plexo. Los plexos desembocan en los ganglios linfáticos y finalmente en el conducto torácico y en el ángulo venoso.

Los vasos linfáticos superficiales están distribuidos por la piel como una red y frecuentemente discurren de forma paralela a las venas superficiales. Los vasos linfáticos subfasciales de los músculos, las articulaciones, los huesos y los órganos acompañan a los vasos sanguíneos.

Denominaremos carga linfática a la totalidad de las sustancias que deben ser drenadas del intersticio a través del sistema linfático.

Es más, el sistema linfático, gracias a sus particularidades anatómicas constituye un segundo sistema de drenaje que trabaja conjuntamente con el sistema venoso para absorber sustancias procedentes del intersticio.

Indicaciones

El Drenaje Linfático Manual (DLM) o la Fisioterapia Descongestiva Combinada (FDC) pueden ser aplicados ante la presencia de las siguientes patologías:

• Linfedemas.
• Fleboedemas.
• Lipedemas.
• Edemas traumáticos.
• Edemas postoperatorios.
• Artrosis.
• Reflejodistrofia simpática – síndrome de Sudeck.
• Patologías reumáticas.

Por otro lado también se tratan otras patologías que a pesar que no existen estudios clínicos sobre el éxito y efecto del drenaje linfático sobre estas, los testimonios orales de multitud de pacientes y el éxito obtenido, frecuentemente visible, han llevado a aplicarlo..

• En el ámbito de la cosmética: acné, acné eritematoso, cicatrices, estrías del embarazo. 
• Del ámbito ortopédico (quirúrgico/traumático: síndrome cervical postraumático, quemaduras, cervical postraumático, quemaduras, cicatrices queloides, artrosis, grandes operaciones de las articulaciones).
• En ginecológico: mastodinia, mujeres puérperas con problemas de lactancia.
• Para mejorar las alteraciones vegetativas y como maniobra terapéutica en: síndrome de burn-out o de estrés, personas mayores tras operaciones difíciles o tras superar una grave enfermedad, en curas de ayuno, en tendencia a la infección en niños (niños linfáticos).

---

Bibliografía: Drenaje Manual según el Método del Dr. Vodder (Hidegard Wittinger, Dieter wittinger, Andrea wittinger, Maria Wittinger), editorial panamericana